Todos creíamos que no tendríamos un final feliz, pero la fuerza y ganas de vivir pudo mas.
Esta historia se inicia hace 18 días, 33 mineros como todos los días ingresaban a la mina subterránea, llamada San José, ubicada en la tercera región de Copiapó de Chile.
Pero aquel día jueves ocurre un evento que siempre esta presente en la mente de todo minero, el temido derrumbe. Aproximadamente a las 14hrs se da el derrumbe, quedando imposibilitados de salir, a las 20 hrs del mismo jueves 05 de agosto se da el alerta, y las medidas de rescate.
Esa misma noche del jueves se inicia la coordinación para el rescate, en primera instancia lograr despejar el área obstruida, con el fin de llegar a lograr a un tipo de comunicación y saber en que condiciones se encuentran los 33 mineros.
Avanzado el día todo indicaba que el rescate seria rápido, se trabajo toda la madrugada del sábado, sacando de la zona derrumbada el material desprendido.
Pero, el sábado en la mañana, sucede lo impensable, lo que siempre se teme, vuelve a suceder un segundo derrumbe, la posibilidad de rescatarlo por la entrada principal se descarta, se notifica que la mina esta inestable.
Se debe atacar el cerro por otros medios, existe la idea de realizar un canal de comunicación por las sondas realizadas por la maquina de sondaje.
Ese mismo día sábado las maquinas perforadoras empiezan una ardua tarea, que en lo teórico suena imposible, se debía llegar y lograr ubicar el refugio que no mide mas de tres metros de ancho, y además se debe indicar que la perforación que realiza la maquina de sondaje no es mas grande que el rollo de un papel higiénico. Y, ademas que la profundidad en donde estarian los mineros es de aproximadamente de 600 metros.
Pasan los días, las maquinas hacen su trabajo, en terreno existen 6 maquinas perforando,no logrando dar con los mineros, los familiares improvisan un campamento cerca del pique, la desesperación se apodera de las autoridades, no se logra dar con el campamento. Ya han pasado cinco días, no se saben las reales condiciones del refugio, si poseen agua, alimentos y lo más importante oxigeno.
Las maquinas avanzan a una velocidad que todo indica que pronto se estaría llegando a los 600 metros de profundidad que estarían los mineros, la intención es por el ducto que deja la perforadora es enviar una cámara para ver en que condiciones se encuentran los 33 mineros.
Al interior de la mina, continúan los derrumbes, los días pasan.
Declaraciones del ministro de minería, en el cual siendo bien realista, duda de la vida, las probabilidades son escasas, la comunidad, los medios de comunicación cuestionan sus dichos.
Vuelve a suceder lo impensable, la sonda llega a una profundidad superior de los 600metros, se encuentran un socavón, vacío, nadie, han pasado ya varios días, para ser mas exacto 15 días, la desesperación se trasmite por los medios de comunicación.
En gran medida culpan a los planos entregados de la mina, dicen que son obsoletos, que no estaban actualizados, practicamente los sondajes estaban navegando a ciegas, pero la fe, único instrumento que quedaba, decía, nos decía que había vida, no se debía bajar los brazos, se debía continuar perforar lograr la comunicación.
Como en tiempos anteriores, cuando las condiciones no han sido las mejores, se saca fuerza de flaqueza, se continua realizando la búsqueda, no importa el gasto, no importa nada, solo saben que están vivos, que están bien, el tiempo se agotaba, se debía lograr la comunicación con la intención de provisionarlos con agua y oxigeno.
Los trabajadores de varias faenas, se ponen de acuerdo de masiva protesta.
Domingo 22 de agosto, sucede lo que todos queríamos escuchar, con todo el corazón queríamos saber y nos convenciamos que estarían vivos, las condiciones no importaban pero que se mantenían vivos, todos queríamos escuchar eso, pero las estadísticas, en las condiciones, que nada estaba a favor costaba creer.
Y ese domingo sucede, lo que todo un país, quería oír, ESTÁN VIVOS!!!
Una carta fue el medio de comunicación, la ganas de vivir nuevamente nos sorprende, que ante las peores condiciones se podría seguir adelante.
ESTAMOS BIEN EN EL REFUGIO LOS 33, una carta anexa se leía y notaba que por partes de ellos existía mas preocupación de como estaban sus familias allá afuera, su fe, confianza, profesionalismo, y ganas de vivir pudo más.
Ya habrá tiempo de cuestionamiento, ya habrá tiempo para mejorar las leyes, pero a veces es bueno oír, escuchar al viejo del cerro, que su piel percutida por el sol, que sus conocimientos no fueron adquiridos en una universidad, que su sapiencia se la entrego la vida, a fuerza de golpes y caídas, su experiencia es muy importante, tantas veces se menciono el mal estado de esta mina.
Pero, ahora es tiempo de festejar, sucedió el MILAGRO, gano nuevamente la vida, este bicentenario ha golpeado tanto a CHILE, pero a porrazos seguiremos adelante, ahora se deben sacar a esos 33 mineros, dicen que el rescate durará entre 3 a 4 meses, nuevamente triunfo la vida, y para terminar ....
... jeje, solo queda reir.
